El mercado de jugadores será muy distinto a corto plazo tras la crisis económica provocada por el coronavirus. Muchos clubes deberán aplicar estrategias efectivas para seguir compitiendo como lo hacían antes de la pandemia. Habrá menos inversiones y las cifras que se solían pagar en el verano bajarán considerablemente.

El Real Madrid será de los clubes, tal y como apuntan los deberes hechos en los años anteriores, que mejor van a salir en la foto el día después de la crisis.

El problema con el que se va a enfrentar es que una de sus prioridades es la dealigerar el número de jugadores cara a la temporada venidera, circunstancia que ya fue muy complicada el pasado verano, en el próximo esa dificultad se puede multiplicar ante las muchas incógnitas que rodean al mercado.

Dirigentes y técnicos del Real Madrid tienen claro que deben reducir una plantilla que en el momento en el que se inicie la próxima temporada contará con 36 jugadores en nómina y todos ellos con muy pocas ganas de querer dejar de pertenecer al equipo madridista.

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