La selección mexicana empezó su participación en la Copa del Mundo sub 17 con un empate sin anotaciones ante su similar de Paraguay en la cancha del Bezerrao.
México y Paraguay iniciaron temerosos, demostrando los nervios del debut mundialista para muchachos de 16 y 17 años.
Con el pasar de los minutos los nervios se fueron diluyendo y se empezaron a crear, a cuenta gotas, jugadas de peligro. En general, solo hubo tres insinuaciones que casi nos hacen celebrar los primeros goles del partido.
México tuvo dos. Efrain Álvarez, del LA Galaxy, disparó, el esférico pegó en un rival y se fue a córner. En la siguiente jugada, le fue anulado un gol a Israel Lunapor fuera de juego.
La otra jugada de peligro fue albirroja. Fabrizio Peralta no pudo conectar de buena manera un tiro de esquina en el que entraba como cuchillo en mantequilla. Su remate se fue desviado consumiéndose de esta manera la primera parte.
Para el complemento los muchachos salieron con más ganas de hacer lo que les gusta, sin embargo, éstas las canalizaron de mala manera pues generaron varios choques en el terreno de juego.
Uno de ellos, el que propició la expulsión, un tanto rigorista, de Eugenio Pizzuto,quien chocó espinillas con Diego Torres. El árbitro, el búlgaro Georgi Kabakov,vio una plancha y le sacó el cartón rojo al capitán azteca.
A partir de este momento, se esperaría que Paraguay se fuera con todo al frente, pero esto no pasó.
La lucha se mantuvo y esto se confirma con los otros choques que aparecieron en el terreno de juego, mismos que hicieron hacer entrar a las asistencias en repetidas ocasiones.
Cuando el reloj marcó los 90 minutos, el árbitro sorprendió a propios extraños al agregar 10 minutos, en los cuales ni México, ni Paraguay generaron ocasiones de peligro.
División de puntos en el Bezerrao. aztecas y guaranís se enfrentarán a Italia y a Islas Salomón (jueves 31 de octubre), respectivamente, en su segundo partido dentro del Grupo F.
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