Con varias lonas, pancartas, altavoz y mesa de registro, alrededor de 30 personas exigían desde afuera del Congreso del Estado a los diputados locales, que legislen a favor de pensiones para las personas en senectud y levantaban el “Censo de los Excluídos, Discriminados y Desechados”.

La organización lleva un censo de 2 mil 671 personas de 60 a 67 años, y uno de sus principales demandas, dijeron, es que cuando llega la jubilación, su pensión es equivalente sólo al 40 por ciento del sueldo que percibían cuando estaban en activo.

“Estamos condenadas a mendigar, a la pobreza, a pedir limozna”, comentó una de las mujeres manifestantes, quien no quizo mencionar su nombre, sólo pidió apoyo de la comunidad en general, para lograr que el poder legislativo haga leyes que beneficien con pensiones a los adultos mayores.

En los mensajes de las mantas, se demandaba la reducción de sueldos de los diputados,  el apoyo al pueblo venezolano y la no intervención estadounidense ni canadiense en Venezuela, así como el alto a la censura.

También firman los mensajes la organización UNE-MAS, que significa Unión Estatal por el Manejo de las Asistencias Sociales.