No acaba de salir de una cuando ya está la otra encima.  Así le está yendo a la administración municipal de Cuauhtémoc.

Recién se logró un pacto con los vecinos del fraccionamiento Magisterial, que por cierto sacaron no sólo raja política sino beneficios de más, pues el pliego petitorio de 12 se fue a 16 puntos.

Ahora tendrá que lidiar con el con el añejo pleito del fraccionamiento Los Alamitos donde hay señalamientos serios de fraude y posible corrupción con la venta de terrenos, que si bien se arrastran de otras administraciones, ahí están más vigentes que nunca.

Es muy probable que el día de hoy la sesión de Ayuntamiento sea interrumpida incluso obstaculizados los trabajos por parte de los vecinos de ese sector, quienes exigen una solución definitiva al conflicto con la constructora Orviz.

Seguro alguien tiene metida la mano y los 60 vecinos que aparecen como afectados no están dispuestos a pagar el precio de esas consecuencias. La rebelión está en proceso.

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Con la víscera retorcida terminó uno que otro panista que no fue considerado como opción viable para la reelección, dígase Ayuntamiento.

Las regidurías no dejan de ser un hueso bastante peleable, sobretodo porque no representa una gran carga de trabajo, al menos no para algunos.

En la búsqueda de mantenerse vigentes, algunos acudieron a tocar la puerta del socorrido edificio de la Zarco en la ciudad capital. Por supuesto que no para todos hay oídos y son más los bateados.

Ni hablar…el relevo es natural, así lo han dispuesto los jerarcas de ese partido.

El ejercicio de la consulta indicativa, lo único que tenía de indicativa era que ya estaba visto que las planillas cambiarían y se abrirían los espacios para gente que reforzará los intereses del proyecto local.

A ver qué pasa con los heridos en el camino.

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Neil Pérez Campos, quien será el abanderado del tricolor en este séptimo distrito dicen trabaja en un territorio que parece conocer a la perfección y en el que transita como pez en el agua.

Es como si la región serrana se hubiera acomodado para tener una nueva representación y sobre todo un buen acumulado de votos, de ese que se denomina como el voto duro, que sumado a la cuota de Cuauhtémoc -cabecera distrital- podría darle la oportunidad de mantener la hegemonía del distrito tricolor.

En la ciudad con Rafa Jaime se puede decir que hay un empate técnico, sin embargo no hay que perder de vista que el panista ya viene de un proceso electoral poco favorable para él hace poco más de cuatro años cuando estuvo postulado a la sindicatura.

Ambos están en el arrancadero, esperan solo la señal de salida, el tiempo de la campaña y por supuesto del día “D” para mostrar el músculo.

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No se descarta una pronta visita de José Reyes Baeza a estas tierras manzaneras, pues como cabeza de la cruzada priísta en el estado con rumbo al primero de julio, vendrá a dirigir la operación cicatriz.

Hablará con los actores que no estarán en boleta alguna para este proceso, pero que sin embargo representan un activo político importante que requieren sumar lo más pronto posible.

Hasta aquí la entrega de Hoy.